-Ring, ring, ring, ¿Si?
-Cariño no me cuelgues, así podré decirte lo que necesitas saber. Te suplico que por favor no te vayas. Sé que es duro recordar las personas que antes éramos. Pero es más difícil imaginar que no estás aquí a mi lado. Estoy paralizada, sigo estancada en este tiempo en el que incluso el sol estaba en el paraíso. Ahora estoy en una cabina telefónica intentando llamar a casa y todo el dinero suelto me lo he gastado en ti. Solo dime ¿Dónde se han ido esos tiempos? Esto no puede ser. ¿Dónde están los planes que hicimos para dos? Si lo de felices para siempre fuera verdad… Yo todavía estaría abrazándote… Todos esos cuentos de hadas que creía de verdad y todas las canciones de amor que me recuerdan a ti… No te quiero decir adiós para toda la vida, porque toda la vida seguiré pensando en ti.